Lo que comenzó como un local de destilados, pasó a ser un bar estilo escocés y terminó siendo uno de los beer garden más importantes del país. Barbudo no para de reinventarse, siempre con el espíritu cervecero.
Compártelo en tus Redes Sociales:

Todo empezó con un pequeño bar de destilados en Pedro de Valdivia con Diagonal Oriente, Barbudo tenía un ambiente similar a los clásicos bares escoceses, que con los años y las nuevas tendencias terminó por transformarse en un destacado beer garden con una hermosa terraza y capacidad suficiente para albergar a 250 comensales y fanáticos de la cerveza, con 21 salidas de shops de cervezas artesanales y más de 100 variedades en botella.

Orlando Vergara y Gabriela Barría son los actuales socios de Barbudo, quienes nos contaron la historia tras el local, cómo se gestó este proyecto y los grandes cambios que han atravesado para llegar a ser uno de los bares cerveceros icónicos de la Plaza Ñuñoa.

¿Cómo se instalaron en Plaza Ñuñoa?

Pasamos muchos años funcionando como bar, dentro de los bares íconos que funcionan en Santiago, en la zona de Pedro de Valdivia. El local era de mi padre (de Orlando) y un amigo de él, Luis Fernández. Pasó el tiempo y mi papá vende su parte, así que sigue solo Luis durante unos años. Hace unos 15 años él muere y el negocio quedó cerrado en su lugar original.  Yo seguí trabajando en el rubro de los restaurantes, y decidí revivir el Barbudo.

Partimos con el proyecto en otro lugar y nace con fuerza el tema de la cultura cervecera en Chile, por lo que lo conversamos y decidimos tomar esa dirección. Al poco tiempo nos resultó chico el local y después de un año encontramos una casona en plaza Ñuñoa. Era una maravilla de local que estaba bien a maltraer, pero nosotros quedamos maravillados con la terraza, la tremenda terraza, ahí surge el tema del beer garden.  Decidimos explotar el concepto de beer garden, con muchas líneas y la terraza, la conversación al aire libre. Fue el primer beer garden de Chile.

Ahora vemos que es un lugar familiar, nuestro público es bien transversal, pueden venir con sus hijos, con sus mascotas, hemos visto nietos con abuelos que vienen a tomarse una cerveza al local y es bonito que se de esa instancia familiar. La idea es que se disfrute la cultura cervecera.

¿En ese sentido, podríamos afirmar qué Barbudo tiene su propia identidad?

Hubo un cambio de identidad, desde la identidad de un bar tipo escocés a este concepto que nos obligó a remodelar el local completo, cuando tomamos el nuevo local lo hicimos de nuevo. Partió con la misma idea del Barbudo anterior, como un bar de destilados, y que se ha adaptado a lo que es la tendencia del momento. Empezamos a notar que la gente comenzó a preguntar por cervezas especializadas, ya no por la típica cerveza industrial. En ese entonces, nos contactaron varios productores artesanales. Entonces fue una decisión pensada, en el sentido que sabíamos que la cerveza artesanal era el boom del momento y qué mejor que darles la entrada a productores nacionales.

Ahora, el arte urbano, los grafitis del local son parte de su identidad, tienen que ver con la historia de la cerveza. Esto fue pintado por la brigada Negotrópica de Valparaíso.

Tengo entendido que sacaron su propia cerveza…

Sí, tenemos más de una variedad. Vamos sacando distintas variedades por temporada, en verano y en invierno.

Además, han tenido una muy buena recepción por parte del público, sale alguna variedad nueva y se acaba altiro. Nosotros tenemos nuestro propio maestro cervecero, quien propone la cerveza y la cocina. Hace poco sacamos una nueva cerveza, más fuerte, como para esta época de invierno. También hacemos variedades especiales como para eventos tipo San Patrick.

¿La iniciativa de cocinar con cerveza viene del asesoramiento de algún experto?

Cuando se toma la decisión de modificar el local para crear un beer garden, fue una de las cosas que conversamos con el administrador, que queríamos hacer. Teníamos la idea de colocar varias líneas de cerveza, hacer la terraza y tener la comida cerca de la cerveza. Empezamos a hacer recetas con un chef, macerábamos una plateada y se cocinaba por 24 horas para hacer unos sándwiches, por ejemplo.

Mucha de nuestra carta actual está hecha con cerveza. La masa de la pizza tiene un poco de cerveza, haciendo las veces de agua y levadura, las carnes están maceradas y preparadas con cerveza. Todo está enfocado en la cultura cervecera.

A propósito de la cultura cervecera, han tomado fuerza iniciativas como el consumo por growler y las catas cerveceras…

Justamente, queremos acercar a la gente a la cerveza artesanal, por eso la iniciativa de gestionar catas, maestros cerveceros que traen sus propias cerveza, capacitar a nuestros trabajadores, nos parece bien. La idea es que los garzones te orienten, te pregunten que te gusta, que se note que saben más que la gente que viene. Entonces tienen hartas capacitaciones, les hacemos pruebas y los evaluamos.

Además, cuando entran, primero se desempeñan como runner, que son los asistentes de los garzones. Para llegar a garzón, tienen que dar un examen. Es la única forma de subir y quedarse en la planta. Es un elemento crucial ya que nos interesa entregar el mejor servicio posible.

¿Cuáles son sus proyectos para este año?

Ahora lo que nos tiene muy contentos es que estamos elaborando nuestras propias hamburguesas. Hemos experimentado con distintos porcentajes de carnes. Partimos con una prueba, nos fue bastante bien, así que pronto queremos lanzarlas en la carta. Además, que la cerveza y la hamburguesa siempre han estado muy ligadas.

También queremos incorporar líneas de cervezas nuevas, unas 3 líneas más, los lanzamientos nuevos de maestros cerveceros y a todo tipo de evento que nos propongan.

Barbudo. Dirección: Jorge Washington 176. Horario 18.00 PM- 01.00 AM